sábado, 20 de septiembre de 2008

Soneto Inglés I

Pensamientos de una silla

Tus párpados son la lluvia de anoche,
tus ojos atención como un regalo.
Tu clavícula me apela un fantoche
y tu sonrisa mofa de algo malo.

Tu sencillez a veces me da envidia;
tu pasto es mucho más verde que el mío.
Eres un hielito y no me fastidia
que camines por mi hombro y me des frío.

Dócilmente se unen las manos de ambos.
La mesa sigue muy quieta, las sillas
ya no soportamos sus miradillas.

Viajan hacia el futuro aquéllos cabos
de la felicidad que ellos se crearon.
¡Pero qué enamorados estuvieron!

1 comentario:

K dijo...

entonces me gusta como piensan las sillas.